Entrenamiento de fuerza: el nuevo aliado anti-edad para la piel, según la ciencia

Entrenamiento de fuerza y envejecimiento: una conexión inesperada

Cuando pensamos en los beneficios del entrenamiento de fuerza, normalmente vienen a la mente la ganancia muscular, la densidad ósea o la prevención de lesiones.
Sin embargo, un nuevo estudio sugiere que levantar pesas también podría rejuvenecer la piel.

Investigadores japoneses (Nishikori S. et al., 2023) evaluaron a 56 mujeres sedentarias de 41 a 59 años, divididas en dos grupos: uno realizó entrenamiento aeróbico y el otro entrenamiento de fuerza durante 16 semanas.

Lo que encontró la investigación

Ambos grupos mejoraron la elasticidad de la piel, pero sólo el grupo de entrenamiento de fuerza mostró un aumento significativo del grosor dérmico, un indicador de rejuvenecimiento cutáneo.

A nivel molecular, las participantes que realizaron fuerza mostraron:

• 🔻 Reducción de factores inflamatorios circulantes (CCL28, CXCL4).

• 🔺 Aumento de la expresión de genes de matriz extracelular (BGN, COL3A1, COL1A1).

• 💪 Fortalecimiento del tejido conectivo dérmico, asociado con mayor firmeza y menor flacidez.

Estos cambios biológicos sugieren que el ejercicio de fuerza modifica el ambiente inflamatorio sistémico y estimula procesos regenerativos que impactan directamente en la piel.

 ¿Por qué la fuerza es clave para la salud de la piel?

El entrenamiento de fuerza promueve adaptaciones hormonales y celulares que reducen el estrés oxidativo, aumentan el flujo sanguíneo y mejoran la oxigenación tisular.
Esto favorece la síntesis de colágeno y elastina, componentes esenciales del soporte dérmico.

Además, una piel con mejor irrigación y menor inflamación tiende a mantener su luminosidad y firmeza con el paso del tiempo.

Aplicación práctica para profesionales de la salud y el fitness

Este hallazgo amplía la relevancia clínica y estética del entrenamiento de fuerza, especialmente en mujeres de mediana edad.

Para los profesionales:

• Incluye programas de fuerza progresiva en planes de bienestar integral.

• Educa sobre su impacto más allá del músculo: salud metabólica, ósea, mental y dérmica.

• Combínalo con una nutrición adecuada en proteínas, antioxidantes y micronutrientes (vitamina C, zinc, cobre) para potenciar la regeneración del colágeno.

Conclusión

El entrenamiento de fuerza no sólo transforma el cuerpo… también puede rejuvenecer la piel desde dentro.
Una razón más para seguir promoviendo la fuerza como parte fundamental de la salud y el envejecimiento activo.

Referencia:
Nishikori S. et al. (2023). Resistance training rejuvenates aging skin by reducing circulating inflammatory factors and enhancing dermal extracellular matrices. Scientific Reports, 13, 9957. doi: 10.1038/s41598-023-37207-9.